ISAAC PERAL
19 años después de que el gran escritor Julio Verne publicara su obra, "Veinte mil leguas de viaje submarino", el objeto de la aventura de ficción se hizo realidad.
Isaac
Peral fue
un inventor, marino y científico español del siglo
XIX (Cartagena,
1 de junio de 1851; Berlín, 22 de mayo de 1895) conocido
principalmente por la invención del
primer submarino torpedero de autopropulsión eléctrica,
denominado actualmente, en su honor: “Submarino
Peral“.
Ingresó
en la Armada en 1866, siguiendo la tradición familiar. Adquirió una
amplia formación técnica pasando por diversos destinos en el
Observatorio Astronómico de San Fernando, la Comisión Hidrográfica
y la nueva Escuela de la Armada, en la que fue profesor de Física y
Química (1882).
Su
vida estuvo marcada por el éxito. Como marino,
la valentía con la que defendió a España le valió numerosas
condecoraciones como la Cruz
Roja del Mérito Naval;
y
como científico,
se ganó un merecido lugar en la historia con la invención
del submarino Peral (entre
otros inventos) y la elaboración de extraordinarios análisis como
el “Tratado
teórico-práctico sobre los huracanes“,
por el cuál le concedieron la Cruz
de la Órden del Mérito Naval,
esta vez por su talento científico.
El
indiscutible éxito del prototipo y los elogios de la prensa
convirtieron a Isaac
Peral en un héroe popular por algún tiempo. Pero las dificultades
encontradas para que el gobierno siguiera apoyando sus
investigaciones le decidieron a abandonar la Marina en 1891 y
establecerse por su cuenta como fabricante de material eléctrico; en
esa época patentó varios inventos prácticos relacionados con el
alumbrado público, hasta que
finalmente falleciera a raíz de una larga enfermedad el 22 de mayo
de 1895.
El
primer submarino moderno
Desde
1885 empezó a interesarse por la navegación submarina, asunto en el
que estaban trabajando al mismo tiempo muchos otros ingenieros e
inventores (entre ellos Narciso Monturiol, también español). Aunque
integró algunas novedades procedentes de otros países, sus
aportaciones resultaron decisivas. Dada su especialización en temas
relacionados con la electricidad, sus investigaciones se referían
sobre todo al manejo de la energía eléctrica para la propulsión en
inmersión.
En
1888 la Armada botó en La Carraca (Cádiz) un prototipo del
submarino Peral que funcionó perfectamente. Se trataba de una nave
de considerables proporciones: de forma fusiforme y construido con
plancha de acero, medía 22 metros de eslora y 2,87 de manga. Peral
había diseñado unas baterías especiales para alimentar a los dos
motores de 30 caballos, capaces de desplazar bajo el agua a 10 nudos
de velocidad las más de ochenta toneladas que pesaba el prototipo.
La nave iba equipada asimismo con otros instrumentos de su invención:
el periscopio, una brújula protegida de posibles desviaciones
provocadas por otros aparatos eléctricos, un "aparato de
profundidades" para estabilizar la nave sin uso de lastres y
diversos purificadores de aire que posibilitaban alargar las
inmersiones. Peral también fue innovador en el armamento: un tubo
lanzatorpedos de su invención, con tres cargas, permitía por
primera vez atacar a distancia a los buques enemigos.
Se
trata del primero que cuenta con las funciones básicas de los
submarinos modernos. Por eso se considera el inventor, ya que desde
hacía siglos se construyeron sumergibles más o menos rudimentarios
que apenas tenían capacidad de maniobra, autonomía, observación
exterior o ataque con torpedos. La construcción del sumergible
superó las limitaciones de los diseños anteriores e inició la era
de la navegación submarina.
El error que salió muy caro a España, a Cartagena y a la Armada
En
1885 el teniente de navío Isaac Peral contactó con el Ministro de
Marina, Manuel
de la Pezuela y Lobo,
para exponerle sus teorías sobre la posibilidad de realizar un
torpedero sumergible para la Armada. El 4 de octubre de 1886 y
mediante una Real Orden, se autorizó la construcción del nuevo
aparato. El 8 de septiembre de 1888 se botó el submarino en San
Fernando (Cádiz) constituyéndose una comisión de marinos presidida
por el capitán general Florencio
Montojo Trillo para
evaluar si el prototipo superaba los criterios de calidad exigidos
por la Armada.
El
buque realizó con éxito todas las pruebas realizadas y demostró
ser una magnífica adquisición para la Armada: disponía de una
autonomía de 66 horas, un radio de acción de 511 kms, tenía
periscopio, aparato de puntería, giroscopio, tubo lanzatorpedos y
servomotor para mantener la estabilidad. En definitiva, era un arma
de guerra excepcional.
La
primera prueba oficial de navegación submarina fue el 7 de junio de
1890. Navegó bajo el agua y realizó el ataque simulado al crucero
"Colón". A pesar del éxito con que se iban superando los
retos del invento, inexplicablemente, en septiembre de 1890, la Junta
técnica que lo juzgaba emitió un informe crítico. En él se decía
que la velocidad y la autonomía de la nave eran inferiores a lo
esperado, que el combate diurno había fracasado y esto desmerecía
la novedad aportada por Peral, y se cuestionaba el funcionamiento de
los motores. La Junta indicó también que el submarino tenia poca
estabilidad, poca velocidad y radio de acción y que no se sumergía
con la rapidez deseada… en resumen, no
servía.
El ministro de Marina, el almirante
Beránguer,
emitió un informe desfavorable del submarino y desaconsejó su
incorporación. Según
los ingenieros y militares, un submarino moderno tampoco habría
pasado esa prueba, según las exigencias que se aplicaron en la
conclusión del informe.
Por
otro lado aparece un espía inglés que colabora con un traficante de
armas: Basil
Zaharoff.
Éste era un experto en boicotear a los competidores, corromper
políticos y vender las mismas armas a varios países. Tanto era su
interés que le había intentado comprar al mismo Peral las patentes
durante un encuentro fortuito en Londres, pero el marino español
había rechazado las interesantes ofertas que le habrían convertido
en un hombre rico. Contrariado por la negativa, Zaharoff comprendió
que la única manera de apoderarse de la patente sería mediante el
sabotaje y el soborno a los políticos de la época. De esta forma
consiguió sustraer del ministerio, en Madrid, los planos del
prototipo del submarino para llevárselos y ser construidos en otros
paises.
Después,
el primer país en construir en serie un sumergible fue Francia, que
además era casi idéntico al de peral y en 1898 España perdió sus
provincias de Cuba, Puerto Rico y la colonia de Filipinas en la
guerra que tuvo lugar con Estados Unidos, cuya flota ya contaba con
acorazados y sumergibles, mientras los barcos españoles eran de
madera, aunque esto no fue por falta de científicos
Referencias:
- "El submarino Peral, de la gloria a la traición" (Javier Sanmateo Isaac Peral)
- Enciclopedia biográfica en línea. http://www.biografiasyvidas.com/
Isaac Peral
- https://www.saberespractico.com/
¿quién fue Isaac Peral?
- http://historiasdelahistoria.com/
De porqué el submarino peral fue desechado (Javier Sanz)
- Región
de Murcia Digital http://www.regmurcia.com/servlet/s.Sl
No hay comentarios:
Publicar un comentario