CARTAGENA Y LA GUERRA ESPAÑOLA DE INDEPENDENCIA
Tratado
de Fontainebleau, 27 de octubre de 1807. El Primer Ministro Manuel Godoy, valido del rey español Carlos IV, se reúne con Napoleón. Allí
hablan de la enemistad compartida con Inglaterra y la alianza de ésta
con Portugal. Desde 1700 la dinastía real francesa de los Borbones,
a la que pertenecía Carlos IV, se había instaurado en España por
lo que las relaciones de Francia y España en ese siglo eran muy
estrechas . A pesar de que el emperador francés no provenía de las
familias reales europeas y que incluso pertenece al ideario
revolucionario que eliminó al Rey de Francia Luis XVI, supo
aprovechar la causa común con los borbones de España y planearon
una
invasión hispano-francesa de Portugal asegurándose el apoyo logístico necesario al tránsito de las
tropas imperiales, bajo el mando del general Jean-Andoche Junot. Godoy fue seguramente engañado en varios aspectos, como el número
de soldados que entrarían, de forma que cuando se diera cuenta ya
fuera demasiado tarde.
Las tropas francesas entraron en España el 18 de octubre de 1807, cruzando su territorio a toda marcha en invierno, y llegaron a la frontera con Portugal el 20 de noviembre. Sin embargo, los planes de Napoleón iban más allá, y sus tropas fueron tomando posiciones en importantes ciudades y plazas fuertes con objeto de derrocar a la Casa de Borbón y suplantarla por su propia dinastía, convencido de contar con el apoyo popular.
En el ambiente se respiraba una fuerte inestabilidad política surgida por la traición conspiratoria de Fernando VII contra su padre Carlos IV, que culminó con el Motín de Aranjuez contra Godoy y el ascenso al poder de Fernando VII. Todo ello fue alentado mediante una campaña nacional de, entre otras cosas, rimas en pasquines con trapos sucios a cerca de supuestos amoríos entre Godoy, el valido del rey, y la reina, y una condición indigna de los tres. Lo que justificó superficialmente la acción del motín por parte de los fernandinos.
¡Traición! ¡Nos han quitado a nuestro rey y quieren llevarse a todas las personas reales! ¡Muerte a los franceses!
La
población se amotinó y hubo choques que las tropas extranjeras
respondieron con inmediata contundencia. Las noticias de los hechos
sobre la brutal represión ejercida por el ejército invasor en Madrid se difundieron y
en otras localidades se alentó la insurrección.
El llamado Bando de los alcaldes de Móstoles, promulgado por Andrés Torrejón y Simón Hernandez, fue la primera iniciativa desde el ámbito local que contribuyó al desprestigio de la Junta de Gobierno, designada por Fernando VII, ante la declaración de Murat del 6 de junio en la que justificaba los excesos de la represión.
Las instrucciones de Fernando VII al marchar hacia Bayona (Francia) fueron terminantes: mientras él estuviera fuera del país, las instituciones españolas debían cooperar con los generales galos. En un primer momento, la administración en pleno acató la orden: desde el Consejo de Castilla hasta los Corregidores Municipales. Pero conforme avanzó el levantamiento, las instituciones, emplazadas entre los rebeldes y un ejército francés resuelto a combatir con dureza la sublevación, perdieron el control de la situación y se volvieron inoperantes.
En la noche el 22 al 23 de mayo, y una vez difundidas las noticias de las abdicaciones forzosas del rey Carlos IV en favor de Fernando VII y de este en el hermano de Napoleón en Bayona, la insurrección se inicia en la ciudad de Cartagena que por entonces era Departamento de Marina y de Artillería, creándose en ella la primera Junta General de Gobierno. Desde Cartagena se mandan correos a las ciudades de Valencia, Granada y Murcia, "con el aviso de la resolución que se había formado en Cartagena, su Departamento de Marina y numerosa guarnición, convidando a dichas ciudades para el mismo objeto" avisando de ello en todas las ciudades y pueblos por los que pasaban estos correos, así como a la escuadra del Departamento de Cartagena que se encontraba en Mahón y que se dirigía a Tolón para unirse a la escuadra francesa, ordenándole que volviera a Cartagena. La insurrección comienza en los días siguientes en Valencia, Granada, Lorca y Orihuela. En Zaragoza, José de palafox y Melci toma el control de la ciudad tras entregar el mando el Capitán General Guillelmi a su segundo, produciéndose el primero de los Sitios de Zaragoza. Mientras en Murcia, el antiguo Secretario de Estado, el Conde de Floridablanca (1728-1808) preside la recién constituida Junta local de Murcia. Estas Juntas se crean en todas las ciudades levantadas, tras crearse la Junta General de Gobierno de Cartagena.
Rendimiento de los franceses en la Batalla de Bailén |
El
contraataque de las fuerzas espontáneas había sido hasta ese
momento eficaz. Sin embargo, Napoleón entró con
numerosos refuerzos de veteranos que infligieron importantes derrotas
y se resituó en la meseta, trasladándose la Junta Central de nuevo
a Sevilla, donde asiste indefensa a la capitulación de Andalucía.
A partir de entonces la resistencia popular, apoyada por tropas al mando de Wellington y los suministros de armas británicos, fueron los que consiguieron expulsar a los invasores, que salieron de España en 1814.
Otro dato importante es que toda España fue ocupada por los franceses, excepto Cartagena. Ello se debe a la gran dificultad que presentaba el asalto de una ciudad amurallada con una base naval, arsenal, contingentes y seguramente por la ayuda británica por mar.
Fuentes:
- wikipedia
- "Fernando VII, el rey felón" (Enrique González duro)
- www.regmurcia.com › Historia › Historia de la Región: La Guerra de Independencia y Floridablanca
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